Y una vez más, un reflejo; soy débil, lo sé, me pueden.
Día de curro en la empresa Tudor de Manzanares con mi compañera Graciela; visitamos las instalaciones siguiendo la comitiva del alcalde. Y entre pasillos y baterías, hay colocadas medias esferas de espejo para facilitar la circulación de los torillos. Es fabuloso comprobar como se pierden y confunden las perspectivas de nuestra visión normal.
Me encantaría poder hacerme con uno de estos espejos, y hacer ciertas fotos... ¿o no resulta sugerente esa bombillita roja...?